Los beneficios de la dieta japonesa
Cuando visitas Japón es raro ver hombre y mujeres gordos. Salvo los luchadores de sumo la gente por aquí es más bien pequeña y delgada. Por supuesto, hay gente con sobrepeso como en todo el mundo pero naturalmente la dieta japonesa no es una dieta que sume kilos. Dicen que apenas el 10% de la población japonesa padece de obesidad, mientras los estadounidenses suman un 66%. ¿Por qué los japoneses tienen el índice de sobrepeso más bajo entre los países desarrollados? Por lo que comen, así que tal vez para bajar de peso debemos seguir la dieta japonesa.
Básicamente, los japoneses comen arroz, vegetales, frutas, soja y pescado. Comen porciones pequeñas de alimentos, muchos vegetales y algas marinas, mucha fruta y pescado y utilizan caldos de pescado y vegetales para saborizar los platos en lugar de aceite o mantequilla. No comen con mucha azúcar y la máxima de que el desayuno es la comida más importante del día puede ser cierta aquí también pues el desayuno japonés típico incluye arroz, pescado, miso (un tipo de caldo) y vegetales.
Dicen los expertos en nutrición que la dieta japonesa es excelente y que es el secreto de la longevidad de la sociedad nipona. Las mujeres no ingieren más de 1950 calorías por día y los hombres 2300: 25% de grasas, 63% de hidratos de carbono y 12% de proteínas. Un balance casi perfecto. ¿Te gusta la idea? Bueno,esta dieta japonesa puede convertirse en una buena dieta para bajar de peso. En poco tiempo sentirás que tu organismo está más limpio, funciona mejor y pierdes peso. Por supuesto, hay que acostumbrarse, pues la dieta occidental es mucho más pesada y la japonesa siempre nos deja el estómago un poco liviano.
Bien, que para seguir esta dieta efectiva solo debes alejar de tu mesa el pan, la mantequilla y el aceite, comprar alimentos frescos y tratar de organizar la dieta para adelgazar en torno al arroz, un carbohidrato de absorción lenta, pescados azules ya que contienen mucho omega 3, infusiones de té verde que es un buen antioxidante, muchas verduras y soja y sus derivados como reemplazos de los lácteos.