Suscribirse por RSSCambiar de hábitos para adelgazar: 10 Consejos eficaces
Antes que nada algunos punto a tener en cuenta de antemano: Salvo muy raras ocasiones, la mayoría de las personas están gordas porque ingieren demasiadas calorías y queman pocas.La obesidad es una enfermedad cuyo origen se halla en la ansiedad (se generan conductas adictivas con respecto a la comida debido a estímulos de recompensa en el cerebro) y gran parte de la culpa se la lleva nuestra propia actitud hacia la comida y hacia el movimiento. Es necesario un cambio de hábitos para adelgazar efectivamente, por eso he aquí, una serie de recomendaciones, 10 consejos a tener en cuenta para bajar de peso.
El conocimiento:
Saber de la dieta que se va a hacer no engorda, es bueno informarse, aprender sobre dietas y sobre la obesidad, acudir al nutricionista y tomarse el asunto de adelgazar en serio. Conocer sobre nutrientes: carbohidratos, proteínas y lípidos; sobre qué alimentos son ricos en tal nutriente y sobre las calorías que aportan.
Leer las etiquetas de los productos, conocer de edulcorantes artificiales y naturales. Se debe tomar conciencia y conocimiento de todo lo que tiene que ver con la dieta.
La Frecuencia:
Cambia comer mucho pocas veces por comer poco muchas veces. Es mucho más efectivo para adelgazar realizar ingestas espaciadas como mínimo en 2 horas y como máximo en 3 horas.
Por ejemplo es bueno realizar : desayuno, una colación a media mañana, el almuerzo, una colación a las 3 de la tarde, la merienda a las 6 de la tarde, otra colación a las 20 y la cena a las 22. 6 o 7 ingestas diarias está bien. Evitando ingerir calorías en exceso antes que nada, todas las calorías suman para sentirnos mal ante el espejo. Cambia el azúcar por el edulcorante y en las colaciones elige una fruta o un yogur de bajas calorías.
Las porciones:
En las comidas principales, no te permitas comer más de un plato chico jamás y deja siempre algo en el plato. Los obesos tienden a dejar los platos como recién lavados, se comen hasta lo último. Si te esfuerzas en dejar un poquito cada vez, ayudarás a controlar tus impulsos.
Las calorías:
Una vez a la semana puedes permitirte comer algo que te gusta mucho, pero en una porción pequeña.
Si por cualquier razón te sales de la dieta un día o una comida, no pienses que todo está perdido ya. La principal causa de abandono de un régimen para adelgazar es uno mismo que luego de tentarse ya no quiere seguir porque le parece que no vale la pena. Pero no es así, siempre vale la pena, volver a empezar.
El Tiempo:
Otro consejo es no comer rápido sino lentamente y pensando lo que estás haciendo. Tómate el tiempo necesario para comer pausadamente. Los obesos suelen comer rápido desconociendo, incluso, el punto de saciedad que tarda unos 15 o 20 minutos en llegar. Por eso ninguna comida principal debería hacerse en menos de ese tiempo.
El hambre:
Jamás te autocastigues y te obligues a sentir hambre. Cuando la persona llega a sentir hambre, come en exceso y termina por abandonar la dieta. Por eso es importante el punto anterior de poner especial cuidado de comer cada 3 horas alguna cosa.
Las personas que tienen tendencia a engordar, las personas con algún grado de obesidad tienen impreso en su cerebro un mecanismo de estímulo por recompensa de comida. Esto les provocará un deseo muy fuerte de comer algo “rico” y calórico. Cuando la persona siente hambre es más propensa a sentir esa sensación de “necesidad” que la llevará a volver a reforzar el estímulo.
La obesidad es una enfermedad incurable por eso se debe pensar que no se trata de hacer una dieta y ya está. Se debe tener en cuenta que siempre uno tendrá tendencia a volver a acumular grasa. Un cambio de hábitos permite al obeso en tratamiento mantener un peso saludable pero nunca debe bajar la guardia.
Paciencia y esfuerzo:
Un buen consejo para evitar la compulsión de comer algo “irresistible” con la excusa de “total, que me va a hacer, si llevo ya 2 meses haciendo dieta” es tener siempre a mano en casa un alimento pensado para ese momento compulsivo: un huevo duro, un yogur light de los más ricos, un pote de gelatina, etc. Debe ser un alimento que nos resulte atractivo dentro de los límites calóricos permitidos.
Para adelgazar de verdad no sirven las soluciones mágicas, no hay píldoras, hierbas, días de ayuno ni días comiendo una sola cosa que te lleven a subsanar el origen del problema.
Sólo sigue buenos consejos para entender la obesidad con la seriedad que se merece ser tratada una enfermedad que es la puerta directa a complicaciones de salud de todo tipo, físicas y mentales. Los accidentes cardiovasculares, la depresión, la diabetes son algunas de las tantas patologías asociadas directamente a la gordura.
No pienses que es fácil adelgazar ni tomes a la ligera tu régimen; es una cuestión de salud.
La balanza:
La balanza no es buen aliado de una dieta. La balanza provoca apuros, alegrías y decepciones para algo tan delicado como es mejorar la salud.
Un buen consejo es no volverse adicto a la balanza porque deja la sensación que se debe bajar 15 kg y ya está. Pero no es así, el obeso debe cambiar su conducta para toda la vida.
El movimiento:
La otra punta del ovillo que lleva a acumular grasas es el movimiento. Las personas gordas se mueven lentamente, evitan esforzarse todo lo que puedan y prefieren el coche o el bus, las escaleras mecánicas, el asensor y mirar tv en la cama, en sus casas hay sillas cómodas y ningún espejo.
Comenzar a hacer compras, quehaceres, trámites caminando en vez de usar un transporte, bajar algunos pisos por escalera y así, progresivamente ir agregando tareas y ejercicio físico para moverse más.
Las salidas:
Los obesos suelen elegir todas sus actividades en relación a la comida y al sedentarismo. Pasa por autoanalizarse un poco uno mismo e intentar ir al teatro en vez de ir al restaurante o salir a caminar o ir a bailar con la pareja es mucho mejor que organizar una cena.
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