Suscribirse por RSSEl poder de la dieta macrobiótica
Sabemos que Gwyneth Paltrow es una de las tantas admiradoras de la cultura oriental. El budismo y el yoga son parte de su vida cotidiana y lo mismo sucede con la dieta macrobiótica, una alternativa saludable a la hora de llevar adelante una sana nutrición.
La dieta macrobiótica fue creada en 1957 por el japonés Georges Ohsawa y está basada en la medicina china y el budismo. Parte del concepto de la salud como equilibrio y se apoya en los principios del yinyang. Según la teoría de Ohsawa, la salud física se consigue cuando estamos en armonía y estos dos principios están en equilibrio. ¿Cómo se llega a este equilibrio? A través de una alimentación saludable y con serenidad espiritual.
Así es como la dieta está basada en un conjunto de alimentos permitidos y no permitidos. El yin representa a los alimentos de origen animal y el yang a los de origen vegetal. La cocina macrobiótica impone un alto consumo de cereales integrados, hortalizas, vegetales, frutas y legumbres. El pescado está permitido dos veces por semana y casi no hay consumo de carne vacuna y pollo. Sólo se consume huevo cada diez días están prohibidas las grasas animales, los productos lácteos, el azúcar, las patatas, las frutas tropicales y los alimentos con químicos, conservantes y colorantes, entre otros.
Esta cocina también se destaca por sus modos de cocción y por el uso de algunos alimentos específicos como las algas marinas, la sal marina y el miso. Y tiene un objetivo máximo: que la alimentación sea placentera.
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